Enseña a tus hijos a ser positivos. La positividad se cultiva, sólo tienes que seguir unos pequeños pasos:

  • Dirige la atención de las cosas a lo que tenemos, no a lo que no se tiene.
  • Enséñale a ser agradecido.
  • Enséñale a saber esperar en una sociedad de feed back rápido. No todo se consigue en el momento.
  • Ayudarle a conectar con actividades donde logre perder la noción del tiempo.
  • Establece un diálogo al final del día donde ambos os contéis al menos tres cosas buenas que os hayan pasado.